Este problema frecuente genera rechazo e incomprensión habitualmente, marcando de forma dramática la vida de los niños que lo padecen y que en caso de no resolverse, hace que lleguen a la edad adulta con trastornos de atención. La medicación es útil en periodos concretos y conlleva efectos secundarios indeseables.
Una parte de la comunidad científica está de acuerdo en que hay factores alimentarios, biológicos, infecciosos o parasitarios que pueden condicionarlo.
Nuestro programa es eficaz al utilizar diferentes técnicas en función del origen de este trastorno.
- Sistema de biorresonancia frecuencial.
- Estudio de las intolerancias alimentarias.
- Dieta de sellado intestinal.
- Campos magnéticos pulsantes.
- Suplementos de vitamina C y D, omega 3 y probióticos.
- Eliminación de metales pesados.